Tres funcionarios inician este año escolar con mucha nostalgia y emoción, pues es su último año en el Colegio San Mateo. Sin duda, es un tiempo de sentimientos encontrados, mucha gratitud en primera instancia hacia Dios y hacia el colegio. Este año verán la siembra que generó una maravillosa cosecha reflejada en años de educación, amistad y compañerismo. Se tratan de Gloria Muñoz, Marisol Aguilar y Juan Herrera.
«Mi nombre es Gloria Angelica Muñoz Berkhoff, oriunda de Valdivia, soy profesora de Inglés de Enseñanza Media, casada con 2 hijos profesionales, Magdalena (enfermera) y Rodolfo (Ingeniero Comercial). Comencé a laborar en el año 1989 en el Liceo Rodulfo Amando Philippi de Paillaco con chicos de 1° a 4° medio, ahí estuve 6 meses, me casé y me vine a vivir a Osorno para trabajar en el Liceo Rahue por 9 años también con alumnos de 1° a 4° medio, en el año 1997 hasta el día de hoy, comencé a trabajar en el Colegio San Mateo (ya llevo 26 años) específicamente en el Segundo Ciclo básico, en ese tiempo el ciclo era desde 5to a 8vo básico, cuando llevaba 2 años aproximadamente en el colegio, con mis colegas de la asignatura de ese entonces (ya no queda ninguno) creamos una prueba que nosotros le pusimos FAT (no recuerdo lo que significan las siglas jajaja…) ha pasado mucho tiempo de eso y además ya no se toma) la que se aplicaba en el término de su enseñanza básica (8vo básico) y la que evaluaba las 4 habilidades del idioma (habla, escucha,
lectura y escritura), teníamos muy buenos resultados donde un gran porcentaje terminaba la Enseñanza Básica hablando en Ingles lo que a mi personalmente me dejaba muy satisfecha. Hoy en día, el Segundo Ciclo corresponde a alumnos desde 3° a 6° básico, yo lo paso increíble con ellos, te entregan mucho amor, mucha energía, es una edad muy rica de mucha inocencia, son esponjitas que aprenden todo lo que uno les puede enseñar, a pesar de que a veces me hacen rabiar. En este ciclo tenemos un concurso, el Spelling Bee, el que ya llevamos haciéndolo mas de 13 años, hace 2 años fuimos invitados por el Colegio San Ignacio el Bosque para participar en el Spelling Bee Internacional (somos hasta el momento el único colegio jesuita del sur invitado). En el año 1997, tuve mi primer encuentro con Dios ya que me bauticé, luego en el 2007 hice mi primera comunión junto a mi hijo Rodolfo que en ese tiempo cursaba 4to básico para después hacer mi confirmación junto a mi hijo que ya estaba en 3° medio. También participe en Coloquio I y Loyola, ambas actividades muy enriquecedoras para el alma y para el crecimiento personal. ¿Qué hare el próximo año? En realidad, ni siquiera lo he pensado, vivo el día a día…eso digo ahora, no sé qué pensaré cuando ya se acerque el día de irme, me imagino que será un momento de
sentimientos encontrados, son 26 años de entrega al colegio uff que no dejan de ser, es toda una vida en lo que es tu segunda casa».
Marisol Isabel Aguilar Aguilera tuvo 23 años en el colegio, «comencé a dar clases de básica y media, yo me sentí emocionada de dar clases en el colegio y compartir mis conocimientos. Hace muchos años, el colegio esta integrado solo por varones, y en esa época comencé a trabajar aquí, luego vino el cambio del sistema. Confieso que fue un poco complejo, dado que solo daba clases a varones y todos mis hijos son varones. Posteriormente, me adapté y todo fluyó de manera estupenda. Mi último curso/jefatura es el sexto básico B, también este año veo salir de cuarto medio a quienes les di clase en sexo básico. Posterior a este año, estaré dedicada a dar clases de química y al estudio de terapias alternativas como el uso de imanes, acupuntura y otras cosas.»
El profesor Juan Antonio Herrera, tiene 37 años aportando a la comunidad sanmateína. «El clima laboral y mística del colegio en general, en especial, enseñanza media, va más allá del ámbito profesional, extendiéndose y manifestándose generosamente en solidaridad y apoyo cuando una compañera o un compañero de trabajo se ve afectado por situaciones aflictivas. En relación al aprendizaje identifico un par de palabras en las que convergen las dimensiones Profesional, Espiritual y Humano, estas son: «La recta intención», frase jesuítica que encierra para mí una orientación de llevar a cabo mis acciones; las que no quedan exentas por supuesto de la equivocación y el error que como todo ser humano imperfecto. ¿Qué se viene para mí una vez cerrado este capítulo? Todavía no lo tengo claro, barajo un par de proyectos que estoy sondeando su factibilidad de que puedan ser una prolongación de mi vida útil y activa».
Fuente: comunicaciones@sanmateo.cl